Proyecto de permacultura en Repela.

Decididos a cambiar el mundo con la famosa técnica "del no hacer nada y dejar que la naturaleza lo haga por ti" hemos emprendido este proyecto experimental de permacultura en la cerca de "Repela".
Agricultura sostenible...

lunes, 19 de septiembre de 2011

El techo recíproco

18 de agosto de 2011.
Por fin se dió con el quiz de la cuestión: anda que no le dimos vueltas al joío techo recíproco... con lo fácil que resulta al final.. Pero suele pasar que cuánto más bulto, menos claridad...
Estuvimos toda una tarde dando vuelta a los palos entre un montó de gente y no fuimos capaces de montarlo. Manolo pasó la noche entrecruzando palos y cuando llegó por la mañana, entre Alberto y él, lo montaron en un plis-plas, cuando llegué ya estaban dando los últimos retoques...

El techo debe acabar soportando su propio peso.

Cada palo aguanta al palo anterior o se soporta en el palo posterior...

La inclinación suficiente.

Se van atando con cuerdas para que no rueden mientras se construye.

Un puntal para descansar el peso hasta que se coloca el último palo.
Finalmente se quitarán las cuerdas.
Y el tejado recíproco
Una nueva coleguilla en Repela

Repela: Huerto de Sequera

VERANO 2011.
Llegó el verano, el calor extremoduro, la sequía...
Pensábamos que, con la cobertura de paja y/o cartón y paja, la humedad aguantaría y pasaríamos el verano con pocos riegos y poca cantidad de agua.
No fue así...
En esta tierra, en cuanto el sol aparece un par de semanas seguidas, seca todo de inmediato. Bien es verdad que estamos en los comienzos y apenas hemos conseguido crear un par de centímetros de suelo, o sí, pero no hemos conseguido retenerlo... Y que algunos de los caballones no cuenten con suficiente cobertura.
El suelo se apretó incluso regando: esta tierra de berrocal, cuanto más la riegas, más se endurece. Queda algo parecido al cemento... bien es verdad, que en cuanto llegan las primeras lluvias se esponja y renace rápidamente.
No preparamos los depósitos de agua, pero tampoco procedía estar acarreando agua continuamente. Los depósitos de agua, cuando se hagan, deben de llenarse con agua de lluvias, traer agua de fuera no es asumible.
Al no disponer de agua, no nos queda más remedio que unirnos al estiaje en el huerto.
Y aceptar que tenemos un huerto de sequera o de secano, o de temporada...

El huerto se pone amarillo como todas las parcelas de alrededor.
La hierba seca sombrea el suelo y fija el rocío aportando esa poca humedad.
Aún regando las plantas no pueden con tantas horas de exposición.
Resisten a duras penas...






Los tomates y sandías de secano son lo único que aguanta.
Consiguen echar frutos...
Y son aprovechados por los orejudos que han vuelto por la ausencia de Koko, el perro, que no aguantó tampoco los rigores del verano y hubo que llevarlo a casa...
Los membrillos y otras frutas siguen a su ritmo sin riegos...

El azufaifo también soporta bien la sequía.
Después de montar todo el riego para los caballones de maíz, judía y calabaza, no pudo ser...
Hay que sentarse a la sombra, con el huerto por delante, a pensar...
Fiona lleva ya algún tiempo en Repela. Se va adaptando bien.
Los patos también sobrellevan el verano, tienen su charca para darse sus baños y comer todo lo que pillan, sobretodo los dos grises que parecen tragapanes...